domingo, 19 de agosto de 2012

En Diario del Domingo por Canal 26 - El consumidor inteligente

Les dejo mi columna del día de hoy en Diario del Domingo por Canal 26, junto a Luis Bremer. Consumidor Inteligente.


En Banda 3.0 por Canal Metro- La historia del dinero y las monedas argentinas

Les dejo mi columna del día 16 de agosto en Banda 3.0. La historia del dinero y las diferentes monedas que se fueron sucediendo en la Argentina.

En 360 TV - Un poco de futurología en "360 al día"


Les dejo mi columna del día 14 de agosto en 360 TV. Dónde estamos y que nos espera.


En Diario del Domingo por Canal 26- Aumento de la producción nacional por la caída de las importaciones

Les dejo mi columna del 12 de agosto en Diario del Domingo por Canal 26. Aumento de la producción nacional como consecuencia de las trabas a las importaciones.


Portfolio Personal - Día del Niño

Les dejo mi columna del día  10 de agosto en Portfolio Personal. Tema: inflación día del niño, cual es la oferta, cual es la situación de la industria juguetera nacional, trabas a los juguetes importados y mucho más.


¡Tiemblan los bolsillos! Se viene el Día del Niño
Pese a la inflación y al menor stock de productos importados, se prevé un aumento del 10% en las ventas por esta fecha. Si bien a lo largo de los primeros meses del año la venta de juguetes se mantuvo casi estancada, cobró mayor dinamismo el último período, alcanzando niveles muy favorables en el mes de julio. Por @matiastombolini.
Por Lic. Matías Tombolini - Columnista de Portfolio Personal
El día del niño ya está entre nosotros. Las caritas de los más pequeños -y los no tanto- esperando al domingo denotan ansiedad por saber qué regalo les tocará, en una de las pocas ocasiones donde quién regala no es un personaje en camello o que llega en trineo. Aquí no hay a quien cargarle la responsabilidad si el regalo no gusta.
Por eso me pareció una buena idea comentar algo sobre los juguetes, sus precios y como esta el sector en la actualidad.

Pese a la inflación y al menor stock de productos importados, se prevé un aumento del 10% en las ventas por el Día del Niño. Si bien a lo largo de los primeros meses del año la venta de juguetes se mantuvo casi estancada, cobró mayor dinamismo el último período, alcanzando niveles muy favorables en el mes de julio.

Las jugueterías y calles se encuentran abarrotadas de gente, y es que el domingo próximo se celebra el día tan ansiado por los chicos.

Los comerciantes señalaron la presencia de un aumento de entre el 10 y el 15 por ciento en los precios y destacaron la poca participación en la oferta de artículos importados. Sin embargo, se mostraron optimistas y prevén un aumento de ventas que rondaría el 10 por ciento.

Según el relevamiento realizado por la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), durante los seis primeros meses del año ingresaron al país un 35 por ciento menos de juguetes importados respecto al mismo periodo del año anterior. De todas maneras, la medida impuesta por el gobierno, impulsó un aumento en la presencia de juguetes de origen nacional, motivo por el cual se pueden encontrar en los comercios infinidades de ofertas.

En este contexto, según marca el mismo organismo, la producción nacional de juguete creció en más de un 20 por ciento.

Para competir con los juguetes importados, la industria juguetera efectúa inversiones anuales de 40 millones de pesos en maquinarias y nuevas tecnologías, según señaló el presidente de la CAIJ, Miguel Faraoni.

Además, desde el organismo lanzaron un concurso de diseño de juguetes en dónde se presentaron más de 160 trabajos de diseñadores profesionales y jóvenes estudiantes de diseño.

La industria local fabrica actualmente alrededor de 10 mil productos, con una facturación que ronda los 500 millones de pesos anuales empleando directa e indirectamente aproximadamente a 12 mil trabajadores.

Si bien la mayor parte de la producción se destina al mercado interno, entre el 8 y 10 por ciento se destina a la exportación.

Uno de los grandes factores que estimulan al boom de ventas, es la oferta cada vez más agresiva de descuentos y promociones brindadas por las diferentes tarjetas bancarias. En este marco, el presidente de la Cámara de Comercio e Industria, Fernando Barrionuevo afirmó que ya son más de 200 los comercios y jugueterías adheridos a las promociones de tarjetas de créditos que ofrecen 12 cuotas sin intereses. Esta estrategia se viene manifestando hace ya unos años, otorgándole a la demanda un gran dinamismo.

Muchos de los bancos lanzaron sus promociones la semana pasada, BBVA Francés, HSBC y Galicia. Esta semana se sumaron el Citi, Comafi e Itaú.
Por otro lado, cabe mencionar que las promociones no estás destinadas solamente a jugueterías. Podemos encontrar una amplísima variedad fundamentalmente en los rubros textiles, artículos electrónicos y deportes. Falabella, Musimundo, Rodó, Walmart, Sport Center, son algunas de las grandes redes comerciales adheridos a esta estrategia de ventas.

Para los más chicos, los juguetes preferidos son los publicitados en la televisión, pese a la merma en la oferta que se produjo de los más famosos (la clásica muñeca norteamericana "Barbie" y los autitos y pistas de "Hot Wheels") a causa de las restricciones a las importaciones.

En cambio, para los preadolescentes, los rubros que lideran la demanda son deportes, electrónica e indumentaria.















Entrevista en Café CNN por CNN en español - Nuevas restricciones al dólar

Les dejo una entrevista que me realizaron el 7 de agosto en Café CNN por CNN en español. Tema: Nuevas restricciones al dólar

http://edition.cnn.com/video/?/video/spanish/2012/08/07/umana-argentina-divisas-intv.cnn

En 360 tv - Economía: historia de la deuda externa argentina

Les dejo mi columna del 7 de agosto en 360 TV. Economía, historia de la deuda externa.

En 360 tv - Economía: se pagó el Boden 2012

Les dejo mi columna del día 6 de agosto en 360 tv. Columna sobre el pago del Boden 2012.


sábado, 4 de agosto de 2012

Portfolio Personal - Historia de la Deuda Externa/Eterna Argentina (tercera y última parte)

Hay que tener en claro que la deuda no es lo nocivo; lo malo es el destino para el cual se fue contrayendo a cada momento. Un repaso del manejo del endeudamiento de los últimos gobiernos, incluído el default y el pago del Boden 2012 de hoy. También lo que nos queda para el año próximo, que recordemos es un año electoral, y en el que Cristina no tendrá la restricción de un pago de deuda abultado. Por @matiastombolini.



Finalmente, a sólo un día que Argentina haga frente al último pago del Boden 2012, entramos en el último tramo del relato sobre la historia de nuestra deuda ETERNA.

Anticipando la conclusión entiendo que es importante repasar con ustedes, los casi 190 años que han pasado desde que en 1824 comenzó este proceso. Es importante comprender como el endeudamiento, que no es malo en sí mismo, ha sido utilizado como una herramienta de dominacion de los paises centrales a lo largo de nuestra historia.

Desde ya, que al aceptar la deuda nosotros somos quienes hemos consentido dicha forma de sometimiento.

Como fuera, lo cierto es que en todos estos años, nunca hubo un correlato serio entre el aumento del nivel de endeudamiento y el avance en las capacidades productivas (y por lo tanto de generacion de empleo) de nuestro país.

La mayor parte de las veces que nos hemos endeudado fue para financiar cuestiones que poco tenian que ver con el desarrollo nacional. Nada ha variado el stock de capital social de nuetro país de la mano de un endeudamiento que a partir de cierto momento solo crecía para financiarce a sí mismo.

La deuda no es lo nocivo; lo malo es el destino para el cual se fue contrayendo a cada momento.

En esta dirección es que las estrategias de desendeudamiento en países como el nuestro, permiten ganar grados de libertad en la determinacion de nuestras politicas economicas, sin la necesidad de contar con la aprobacion de terceros que normalmente estan interesados en su propio lucro antes que el bienestar de la nación.

El comienzo de la nueva década se inaugura con un contexto en los países centrales que comienzan a reclamar el pago puntual de la deuda y sus intereses.

Del '80 al '83, la deuda pasa de U$S 27.1K millones a U$S 44.3K millones.
A lo largo de todo este período, principalmente a partir del '81, comienza la estatización de la deuda, en dónde aproximadamente U$S 14.5K millones pasaron de ser deuda privada a deuda estatal.

El gobierno de Alfonsín, tras la vuelta a la democracia, ambicionó con la idea de determinar qué parte de la deuda era legítima, esfuerzos que fueron sucumbidos por las presiones del establishment.

Con Bernardo Grinspun como titular del Palacio de Hacienda, se logra refinanciar la deuda de los años '82 a '85 con una baja sustancial de las tasas.
Reclamo que se da en un contexto de constante deterioro en los términos de intercambio a favor de los países industrializados volviendo cada vez más dificultoso el pago de los servicios de la deuda.

En el marco de una economía con 625% de inflación, tensiones y reveses políticos y su enfrentamiento irascible con el capital transnacional, no queda otra que dar un paso al costado por ese ministro de economía.

Durante la gestión de Alfonsín, la balanza de pagos muestra un feroz déficit generado por el pago de los servicios de la deuda, arrojando hacia 1988 los siguientes saldos en materia de deuda:



El mandato radical concluye anticipadamente, con una inflación cercana al 200% y una deuda externa que ronda los U$S 60k millones.

La política económica del periodo menemista resguarda y profundiza el modelo implantado por la dictadura genocida. En ese sentido, se sancionan leyes como la Ley de Reforma del Estado que abre camino a las privatizaciones, igualdad entre el capital extranjero y el nacional (legitimando la desigualdad real entre ellas), reforma tributaria regresiva, desregulación financiera, privada, flexibilización laboral, disciplina fiscal, entre otras nefastas medidas.

El menemismo se preocupa por resguardar los intereses de los acreedores externos a través del Plan Brady (1992), llevando a cabo el canje de los viejos bonos de la deuda externa en poder de los bancos extranjeros por nuevos bonos Brady. Con una deuda publica de U$S 59k millones, el acuerdo se reduce a financiar U$S 29.9k millones (la mitad de la deuda).

Poco después se asiste al otorgamiento de nuevos beneficios al sector financiero a través de la "capitalización de la deuda". Esta medida permite comprar activos (desde la telefonía y los transportes hasta la distribución de la energía, puertos bancos y rutas) entregando títulos de baja cotización a los cuales el Estado Argentino les reconoce su valor nominal entero con presencia de su valor real.

El precio de la moneda totalmente sobrevaluado conlleva a un déficit comercial que comienza a carcomer el sistema. El déficit del periodo menemista supera los U$S 76k millones, lo que explica que a pesar de la venta de las empresas públicas, la deuda pública se incrementó en alrededor de U$S 60k millones.

Si bien en los primeros años, la deuda no creció demasiado por la venta de las empresas públicas, el panorama cambia radicalmente a partir de 1994, debido a la necesidad de cerrar la brecha negativa de la balanza de pagos. Asimismo, las grandes empresas extranjeras, tanto industriales como financieras y prestadoras de servicios públicos, recurren a su vez, al crédito externo, por lo cual la deuda externa privada crece durante esos años.

La fuga de capitales fue un suceso corriente tanto durante la dictadura como en los gobiernos de Alfonsín y Menem. Se calcula que en 1998 hubo U$S 75k millones en el exterior propiedad de argentinos; es decir, 3 veces la cantidad de divisas en posesión del BCRA. Al crecer el riesgo país, esta fuga se profundizó. En 1999, los argentinos tenían afuera U$S 97k millones; es decir, un tercio del PBI.

Menem cierra su ciclo con una deuda externa publica de U$S 121.8 millones, que deben sumarse a los U$S 22k millones que deben las provincias y municipalidades, más un valor estimado de U$S 48k millones de deuda externa privada.

El gobierno de De La Rua se dedicó a administrar el modelo imperante con una deuda externa aproximada de U$S 140k millones. Pudo sobrevivir dos años gracias a negociaciones con el FMI que le otorgaron préstamos de gran envergadura a cambio de feroces ajustes fiscales, evitar nuevos endeudamientos y desregular las obras sociales. El mega-canje y el Blindaje son líneas de crédito de este estilo orientado a que las empresas privatizadas, saquen su dinero del país sin desestabilizar las cuentas.

Con el nombramiento de Cavallo se aplica la receta liberal de reducir gastos y aumentar la presión impositiva en busca del 'déficit cero'. La recesión y la fuga de capitales continuaron a ritmo acelerado. A fines de noviembre de 2001, una nueva corrida puso en peligro la sustentabilidad del sistema financiero, y el ministro Cavallo decidió la implementación del denominado 'corralito', el cual congelaba la posibilidad de retirar libremente los depósitos bancarios. Era el principio del fin.

De La Rua abandona la presidencia con una deuda externa de U$S 154.1 millones, una pobreza que alcanzo el 57,5%, índices de indigencia al 27,5% y desocupación de 16,4%.

El default declarado durante el interinato de Adolfo Rodríguez Saa superó los U$S 80k millones.

Duhalde devaluó la moneda (el mercado ya lo había hecho solo), pesificó los depósitos en moneda extranjera y aplicó una serie de medidas sociales tendientes a atenuar los efectos de una economía recesiva que había incrementado la pobreza e indigencia.

En septiembre de 2002, el gobierno anunció la emisión de Bonos (Boden) del Estado Nacional para los depositantes del sistema financiero que se presentarán al canje de depósitos reprogramados: Boden 2005 por un monto de U$S 885 millones, Boden 2007 por U$S 355 millones y Boden 2012 por U$S 4.3k millones.. La emisión fue de U$S 3k millones y U$S 7.32k millones respectivamente.

Néstor Kirchner asume la presidencia en 2003. La política económica de su gobierno continuó los lineamientos establecidos por Lavagna bajo la presidencia de Duhalde, manteniendo la devaluación de la moneda mediante una fuerte participación del BCRA en la compra de divisas, impulsando las exportaciones, etc. La política de dólar alto permitió producir bienes y servicios a precios competitivos en el mercado internacional.

A principios de 2005 se lanzo oficialmente la operación de canje de deuda en default. Dicho canje alcanza un exitoso 76% de adhesiones. De los U$S 81.8k millones, entraron en el canje U$S 62.2k millones. Bajo ese mecanismo se entregaran como parte del canje nuevos bonos de deuda por valor de U$S 35.2 millones. La quita nominal alcanzó los U$S 27k millones.

Según cifras oficiales, la deuda total bajó a U$S 125k millones, lo que corresponde una quita de U$S 67k millones.

La nueva estructura de la deuda mostró algunos aspectos más favorables: la proporción en pesos argentinos pasó de un 3% a un 38% después del canje, por ejemplo. Además, los plazos se extendieron y los intereses son menores. Finalmente, los bonos tienen componentes de ajuste por inflación o están directamente atados al crecimiento del PBI.

El gobierno de Kirchner logró imponer sus condiciones en la renegociación por sobre los intereses del capital internacional.

En diciembre de 2005, decidió liquidar la deuda argentina con el FMI en un solo pago, y nueva financiación, por un total de U$S 9.8k millones utilizando reservas internacionales que alcanzaron un valor de U$S 28k millones.

En 2010 (bajo el mandato de Cristina Fernández), se lanza el canje de deuda por aquellos bonos que no entraron en el canje realizado en 2005. Una operación por alrededor de U$S 20k millones. El nivel de aceptación alcanzó el 66.3% de los acreedores.

En noviembre de 2010, se comenzó la renegociación de la deuda con el Club de Paris sin la intervención del FMI. Deuda que ascendía a U$S 6.7k millones.

Según datos del Ministerio de Economía, a fines de septiembre de 2011, la deuda pública externa ascendía a U$S 175.3k millones (42,7% del PBI).
Otro dato a tener en cuenta es que la deuda que posee Argentina hoy en día, es en pesos y está en su mayoría en poder de organismos públicos.

El 3 de agosto, el Gobierno pagará la última cuota del Boden 2012, una operación hecha diez años atrás por el equipo económico de Roberto Lavagna para desactivar el corralito.

Los bancos confiscaron unos 70.000 millones de dólares de ahorristas, durante la peor crisis económica del país. El gobierno prevé liquidar el Boden 2012, por 2.300 millones de dólares que determinará el fin del corralito por el cual los depósitos de miles de ahorristas quedaron atrapados en los bancos durante la crisis de Argentina. El pago de la última cuota de dicho bono se llevará a cabo con reservas del BCRA.

Además del Boden 2012, el gobierno argentino afronta este año otro abultado compromiso, el Cupón-PIB por unos 3.000 millones de dólares.

El Boden 2012 es el único que consiguió ganarle al dólar en el mercado paralelo. En lo que va del año ya acumula una suba nada menos que del 45%. Se trata del principal medio utilizado por los inversores para acceder a divisas a través de un instrumento legal. Desde mayo, cuando directamente la AFIP prohibió la compra de dólares, este bono trepó todavía aún más. Es tal la demanda que actualmente se pagan 680 pesos por cada 100 dólares a cobrar el 3 de agosto. Claro que con la desaparición de este título en pocas semanas, los inversores ya comienzan a reemplazarlo por otros bonos que cotizan en dólares, pero se pueden comprar en pesos. Entre los preferidos, ya se ubican el Boden 2015 y el Bonar X (vence en el año 2017).

Según informa El Cronista, el Bonar tiene como fecha de vencimiento el 17 de abril del 2017. El bono tiene semestralmente una tasa fija del 7% y paga el capital al vencerse, con una ganancia del 15% en dólares.

El Boden 15, por su parte, tiene como fecha de vencimiento el 3 de octubre del 2015 y registra un beneficio del 14,7%. Como en el caso del Bonar, mantiene la misma tasa y el capital se retorna al cumplirse el plazo.

Resuenan como oportunidades también el Bonar XII y el Boden 2013, ya que acumulan rendimientos del 8,5% este mes

Para el año que viene la situación luce mucho más holgada. Sobre todo si la economía crece por debajo de 3,2%: en ese caso no se pagaría el cupón atado a la evolución del producto bruto. Según datos privados (los oficiales no están actualizados a la fecha), la brecha a financiar para este año es de US$ 14.500 millones, aproximadamente la mitad de ese monto debe abonarse en dólares (el resto de la deuda está denominada en pesos). Para 2013 la cifra caerá a US$ 4.000 millones y en 2014 a US$ 2.000 millones. Es un dato a tener muy en cuenta; el año que viene es electoral y Cristina no tendrá la restricción de un pago de deuda abultado.

Uno de los beneficios de la política de desendeudamiento de la última década fue la mejora de la composición de la deuda pública. Hoy más de la mitad de los pasivos son con respecto al propio sector público. La nacionalización del sistema de las AFJP y el crecimiento económico de los últimos años fueron los principales factores que explicaron el cambio de cartera. La principal consecuencia favorable de contar con más de la mitad de la deuda pública en manos de agencias del Estado es que el país no corre riesgo de refinanciamiento.

viernes, 3 de agosto de 2012

Portfolio Personal -Deuda Externa (tercera parte)

"La deuda de Argentina, más que externa, es eterna" (tercera e imperdible última parte)
Hay que tener en claro que la deuda no es lo nocivo; lo malo es el destino para el cual se fue contrayendo a cada momento. Un repaso del manejo del endeudamiento de los últimos gobiernos, incluído el default y el pago del Boden 2012 de hoy. También lo que nos queda para el año próximo, que recordemos es un año electoral, y en el que Cristina no tendrá la restricción de un pago de deuda abultado. Por @matiastombolini.
Por el economista Matías Tombolini, para Portfolio Personal.
Finalmente, a sólo un día que Argentina haga frente al último pago del Boden 2012, entramos en el último tramo del relato sobre la historia de nuestra deuda ETERNA.

Anticipando la conclusión entiendo que es importante repasar con ustedes, los casi 190 años que han pasado desde que en 1824 comenzó este proceso. Es importante comprender como el endeudamiento, que no es malo en sí mismo, ha sido utilizado como una herramienta de dominacion de los paises centrales a lo largo de nuestra historia.

Desde ya, que al aceptar la deuda nosotros somos quienes hemos consentido dicha forma de sometimiento.

Como fuera, lo cierto es que en todos estos años, nunca hubo un correlato serio entre el aumento del nivel de endeudamiento y el avance en las capacidades productivas (y por lo tanto de generacion de empleo) de nuestro país.

La mayor parte de las veces que nos hemos endeudado fue para financiar cuestiones que poco tenian que ver con el desarrollo nacional. Nada ha variado el stock de capital social de nuetro país de la mano de un endeudamiento que a partir de cierto momento solo crecía para financiarce a sí mismo.

La deuda no es lo nocivo; lo malo es el destino para el cual se fue contrayendo a cada momento.

En esta dirección es que las estrategias de desendeudamiento en países como el nuestro, permiten ganar grados de libertad en la determinacion de nuestras politicas economicas, sin la necesidad de contar con la aprobacion de terceros que normalmente estan interesados en su propio lucro antes que el bienestar de la nación.

El comienzo de la nueva década se inaugura con un contexto en los países centrales que comienzan a reclamar el pago puntual de la deuda y sus intereses.

Del '80 al '83, la deuda pasa de U$S 27.1K millones a U$S 44.3K millones.
A lo largo de todo este período, principalmente a partir del '81, comienza la estatización de la deuda, en dónde aproximadamente U$S 14.5K millones pasaron de ser deuda privada a deuda estatal.

El gobierno de Alfonsín, tras la vuelta a la democracia, ambicionó con la idea de determinar qué parte de la deuda era legítima, esfuerzos que fueron sucumbidos por las presiones del establishment.

Con Bernardo Grinspun como titular del Palacio de Hacienda, se logra refinanciar la deuda de los años '82 a '85 con una baja sustancial de las tasas.
Reclamo que se da en un contexto de constante deterioro en los términos de intercambio a favor de los países industrializados volviendo cada vez más dificultoso el pago de los servicios de la deuda.

En el marco de una economía con 625% de inflación, tensiones y reveses políticos y su enfrentamiento irascible con el capital transnacional, no queda otra que dar un paso al costado por ese ministro de economía.

Durante la gestión de Alfonsín, la balanza de pagos muestra un feroz déficit generado por el pago de los servicios de la deuda, arrojando hacia 1988 los siguientes saldos en materia de deuda:



El mandato radical concluye anticipadamente, con una inflación cercana al 200% y una deuda externa que ronda los U$S 60k millones.

La política económica del periodo menemista resguarda y profundiza el modelo implantado por la dictadura genocida. En ese sentido, se sancionan leyes como la Ley de Reforma del Estado que abre camino a las privatizaciones, igualdad entre el capital extranjero y el nacional (legitimando la desigualdad real entre ellas), reforma tributaria regresiva, desregulación financiera, privada, flexibilización laboral, disciplina fiscal, entre otras nefastas medidas.

El menemismo se preocupa por resguardar los intereses de los acreedores externos a través del Plan Brady (1992), llevando a cabo el canje de los viejos bonos de la deuda externa en poder de los bancos extranjeros por nuevos bonos Brady. Con una deuda publica de U$S 59k millones, el acuerdo se reduce a financiar U$S 29.9k millones (la mitad de la deuda).

Poco después se asiste al otorgamiento de nuevos beneficios al sector financiero a través de la "capitalización de la deuda". Esta medida permite comprar activos (desde la telefonía y los transportes hasta la distribución de la energía, puertos bancos y rutas) entregando títulos de baja cotización a los cuales el Estado Argentino les reconoce su valor nominal entero con presencia de su valor real.

El precio de la moneda totalmente sobrevaluado conlleva a un déficit comercial que comienza a carcomer el sistema. El déficit del periodo menemista supera los U$S 76k millones, lo que explica que a pesar de la venta de las empresas públicas, la deuda pública se incrementó en alrededor de U$S 60k millones.

Si bien en los primeros años, la deuda no creció demasiado por la venta de las empresas públicas, el panorama cambia radicalmente a partir de 1994, debido a la necesidad de cerrar la brecha negativa de la balanza de pagos. Asimismo, las grandes empresas extranjeras, tanto industriales como financieras y prestadoras de servicios públicos, recurren a su vez, al crédito externo, por lo cual la deuda externa privada crece durante esos años.

La fuga de capitales fue un suceso corriente tanto durante la dictadura como en los gobiernos de Alfonsín y Menem. Se calcula que en 1998 hubo U$S 75k millones en el exterior propiedad de argentinos; es decir, 3 veces la cantidad de divisas en posesión del BCRA. Al crecer el riesgo país, esta fuga se profundizó. En 1999, los argentinos tenían afuera U$S 97k millones; es decir, un tercio del PBI.

Menem cierra su ciclo con una deuda externa publica de U$S 121.8 millones, que deben sumarse a los U$S 22k millones que deben las provincias y municipalidades, más un valor estimado de U$S 48k millones de deuda externa privada.

El gobierno de De La Rua se dedicó a administrar el modelo imperante con una deuda externa aproximada de U$S 140k millones. Pudo sobrevivir dos años gracias a negociaciones con el FMI que le otorgaron préstamos de gran envergadura a cambio de feroces ajustes fiscales, evitar nuevos endeudamientos y desregular las obras sociales. El mega-canje y el Blindaje son líneas de crédito de este estilo orientado a que las empresas privatizadas, saquen su dinero del país sin desestabilizar las cuentas.

Con el nombramiento de Cavallo se aplica la receta liberal de reducir gastos y aumentar la presión impositiva en busca del 'déficit cero'. La recesión y la fuga de capitales continuaron a ritmo acelerado. A fines de noviembre de 2001, una nueva corrida puso en peligro la sustentabilidad del sistema financiero, y el ministro Cavallo decidió la implementación del denominado 'corralito', el cual congelaba la posibilidad de retirar libremente los depósitos bancarios. Era el principio del fin.

De La Rua abandona la presidencia con una deuda externa de U$S 154.1 millones, una pobreza que alcanzo el 57,5%, índices de indigencia al 27,5% y desocupación de 16,4%.

El default declarado durante el interinato de Adolfo Rodríguez Saa superó los U$S 80k millones.

Duhalde devaluó la moneda (el mercado ya lo había hecho solo), pesificó los depósitos en moneda extranjera y aplicó una serie de medidas sociales tendientes a atenuar los efectos de una economía recesiva que había incrementado la pobreza e indigencia.

En septiembre de 2002, el gobierno anunció la emisión de Bonos (Boden) del Estado Nacional para los depositantes del sistema financiero que se presentarán al canje de depósitos reprogramados: Boden 2005 por un monto de U$S 885 millones, Boden 2007 por U$S 355 millones y Boden 2012 por U$S 4.3k millones.. La emisión fue de U$S 3k millones y U$S 7.32k millones respectivamente.

Néstor Kirchner asume la presidencia en 2003. La política económica de su gobierno continuó los lineamientos establecidos por Lavagna bajo la presidencia de Duhalde, manteniendo la devaluación de la moneda mediante una fuerte participación del BCRA en la compra de divisas, impulsando las exportaciones, etc. La política de dólar alto permitió producir bienes y servicios a precios competitivos en el mercado internacional.

A principios de 2005 se lanzo oficialmente la operación de canje de deuda en default. Dicho canje alcanza un exitoso 76% de adhesiones. De los U$S 81.8k millones, entraron en el canje U$S 62.2k millones. Bajo ese mecanismo se entregaran como parte del canje nuevos bonos de deuda por valor de U$S 35.2 millones. La quita nominal alcanzó los U$S 27k millones.

Según cifras oficiales, la deuda total bajó a U$S 125k millones, lo que corresponde una quita de U$S 67k millones.

La nueva estructura de la deuda mostró algunos aspectos más favorables: la proporción en pesos argentinos pasó de un 3% a un 38% después del canje, por ejemplo. Además, los plazos se extendieron y los intereses son menores. Finalmente, los bonos tienen componentes de ajuste por inflación o están directamente atados al crecimiento del PBI.

El gobierno de Kirchner logró imponer sus condiciones en la renegociación por sobre los intereses del capital internacional.

En diciembre de 2005, decidió liquidar la deuda argentina con el FMI en un solo pago, y nueva financiación, por un total de U$S 9.8k millones utilizando reservas internacionales que alcanzaron un valor de U$S 28k millones.

En 2010 (bajo el mandato de Cristina Fernández), se lanza el canje de deuda por aquellos bonos que no entraron en el canje realizado en 2005. Una operación por alrededor de U$S 20k millones. El nivel de aceptación alcanzó el 66.3% de los acreedores.

En noviembre de 2010, se comenzó la renegociación de la deuda con el Club de Paris sin la intervención del FMI. Deuda que ascendía a U$S 6.7k millones.

Según datos del Ministerio de Economía, a fines de septiembre de 2011, la deuda pública externa ascendía a U$S 175.3k millones (42,7% del PBI).
Otro dato a tener en cuenta es que la deuda que posee Argentina hoy en día, es en pesos y está en su mayoría en poder de organismos públicos.

El 3 de agosto, el Gobierno pagará la última cuota del Boden 2012, una operación hecha diez años atrás por el equipo económico de Roberto Lavagna para desactivar el corralito.

Los bancos confiscaron unos 70.000 millones de dólares de ahorristas, durante la peor crisis económica del país. El gobierno prevé liquidar el Boden 2012, por 2.300 millones de dólares que determinará el fin del corralito por el cual los depósitos de miles de ahorristas quedaron atrapados en los bancos durante la crisis de Argentina. El pago de la última cuota de dicho bono se llevará a cabo con reservas del BCRA.

Además del Boden 2012, el gobierno argentino afronta este año otro abultado compromiso, el Cupón-PIB por unos 3.000 millones de dólares.

El Boden 2012 es el único que consiguió ganarle al dólar en el mercado paralelo. En lo que va del año ya acumula una suba nada menos que del 45%. Se trata del principal medio utilizado por los inversores para acceder a divisas a través de un instrumento legal. Desde mayo, cuando directamente la AFIP prohibió la compra de dólares, este bono trepó todavía aún más. Es tal la demanda que actualmente se pagan 680 pesos por cada 100 dólares a cobrar el 3 de agosto. Claro que con la desaparición de este título en pocas semanas, los inversores ya comienzan a reemplazarlo por otros bonos que cotizan en dólares, pero se pueden comprar en pesos. Entre los preferidos, ya se ubican el Boden 2015 y el Bonar X (vence en el año 2017).

Según informa El Cronista, el Bonar tiene como fecha de vencimiento el 17 de abril del 2017. El bono tiene semestralmente una tasa fija del 7% y paga el capital al vencerse, con una ganancia del 15% en dólares.

El Boden 15, por su parte, tiene como fecha de vencimiento el 3 de octubre del 2015 y registra un beneficio del 14,7%. Como en el caso del Bonar, mantiene la misma tasa y el capital se retorna al cumplirse el plazo.

Resuenan como oportunidades también el Bonar XII y el Boden 2013, ya que acumulan rendimientos del 8,5% este mes

Para el año que viene la situación luce mucho más holgada. Sobre todo si la economía crece por debajo de 3,2%: en ese caso no se pagaría el cupón atado a la evolución del producto bruto. Según datos privados (los oficiales no están actualizados a la fecha), la brecha a financiar para este año es de US$ 14.500 millones, aproximadamente la mitad de ese monto debe abonarse en dólares (el resto de la deuda está denominada en pesos). Para 2013 la cifra caerá a US$ 4.000 millones y en 2014 a US$ 2.000 millones. Es un dato a tener muy en cuenta; el año que viene es electoral y Cristina no tendrá la restricción de un pago de deuda abultado.

Uno de los beneficios de la política de desendeudamiento de la última década fue la mejora de la composición de la deuda pública. Hoy más de la mitad de los pasivos son con respecto al propio sector público. La nacionalización del sistema de las AFJP y el crecimiento económico de los últimos años fueron los principales factores que explicaron el cambio de cartera. La principal consecuencia favorable de contar con más de la mitad de la deuda pública en manos de agencias del Estado es que el país no corre riesgo de refinanciamiento.

En Banda 3.0 por canal Metro- Historia de la Deuda Externa / Eterna (3º parte)

Les dejo mi columna en Banda 3.0 por canal metro. 3ra parte deuda ETERNA




jueves, 2 de agosto de 2012

Canal 26 con Luis Bremer - Balance, Subsidios, Precios y la Economía en Casa


Banda 3.0 - Dolar, Inflación y Desempleo


Portfolio Personal - Deuda Eterna (segunda parte)

Cada vez falta menos para el pago del RG12. Se acerca el "Dia de la independencia económica" como dijo el Ministro de Economia Hernan Lorenzino. ¿Será así? Lo dudo, pero sin embargo siempre es una buena idea saber cómo llegamos a deber lo que debemos, al menos a grandes rasgos. Por @matiastombolini.
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Habíamos concluido la columna anterior en 1890, año en que la Argentina se encontraba imposibilitada de hacerse cargo de la deuda. Este modelo económico demostraba su falta de sustentabilidad ya que, al no poder generar las divisas necesarias, se veía obligado a recurrir continuamente al crédito externo y a afrontar la pesada carga de los intereses.
Durante la presidencia provisional de Carlos Pellegrini, el plan para hacer frente a esta crisis financiera, consistió en frenar esta ola de pedidos de empréstitos a los países centrales y cambiar la forma de financiamiento.

Desde Gran Bretaña y el resto de los países acreedores, se estaba ejerciendo una presión muy fuerte al país para que éste asumiera sus compromisos.

La crisis que se originó en la época de Juárez Celman dejó un sistema bancario desvastado donde quebraron las entidades más importantes de la época (Banco Nacional y Banco Provincia, entre otros). Es así que Pellegrini recurre a nuevo empréstito y funda el Banco Nación.

Pero a pesar de los esfuerzos, el modelo económico seguía girando en torno los grandes exportadores de granos, que obtenían grandes riquezas para ellos, pero migajas para el país; con una balanza comercial que durante todo el período fue negativa, una fuerte remisión de utilidades al extranjero, los bajos precios de las exportaciones, los altos precios de las importaciones, el drenaje por servicios de deuda, los gastos de turismo de la clase alta, los diversos servicios como fletes y seguros, que estaban en manos de empresas extranjeras, y utilidades giradas al exterior que endeudaban a la Argentina cada vez más.

Antes de la llegada de Yrigoyen al poder en 1916, la Argentina estaba endeudada por 121 millones de libras; un 50% más de lo que debía en la época de la segunda presidencia de Roca, en 1904.

En la primer etapa de Yrigoyen al poder, la Argentina no toma nuevos empréstitos y de hecho las buenas cosechas y los altos precios de los productos agropecuarios (a causa de la Primera Guerra Mundial) y un aumento de la producción industrial que permitió sustituir importaciones, marca una recuperación del país en materia de deuda. Durante su primer mandato, la deuda se redujo a 101 millones de libras, es decir poco menos del 20%.

La balanza de pagos durante el mandato de Alvear fue siempre desfavorable. En esta etapa el endeudamiento se basó en aumento de las importaciones, remuneración de todos los capitales invertidos en Argentina, el servicio de la deuda pública en manos de extranjeros, los dividendos e intereses de títulos de ferrocarriles y otras sociedades de acciones, fletes y seguros, envíos de dinero hechos por los inmigrantes a sus familias en el país de origen y los gastos de turismo. Hubo un aumento del 40% de la deuda hasta dejarla en 143 millones de libras.

La década del '30, conocida también como la década infame, estuvo caracterizada por pedidos permanente de empréstitos a Estados Unidos y Gran Bretaña. En pocos años la deuda ascendería a casi 150 millones de libras Un hito particular de esta época es el Tratado Roca-Runciman, por el cual nuestro país contrae un nuevo préstamo por algo más de 13 millones de libras. Se trata de un empréstito dirigido a liberar utilidades bloqueadas de empresas inglesas en Argentina que no podían girarse por carencia de divisas, de manera tal que un 70% de ese préstamo pasó directamente de la Bolsa de Valores de Londres a las arcas de las casas matrices de las empresas ferroviarias, bancarias, comerciales, etc.

También legitimó a los frigoríficos anglo-norteamericanos para que controlasen el 85% de las exportaciones de carne. Asimismo, el gobierno argentino aseguró la libertad de importación del carbón y otras manufacturas inglesas, y se comprometió a dar un trato benévolo a las inversiones británicas.

Sólo la Segunda Guerra Mundial pudo salvar a la Argentina del descalabro económico. A partir de esos años, la balanza comercial y la de pagos de esos años continúan arrojando saldos favorables, especialmente por la disminución de importaciones.

La deuda que a fines de los '30 era de casi 150 millones de libras, cae en 4 años de guerra a 80 millones.

En 1946 asume Perón como presidente y entre 1946 y 1948 se concretan pagos al exterior por U$S 264 millones quedando cancelada la deuda hasta 1950. Esto se debió a las grandes cantidades de reservas acumuladas sobre la guerra, pero también, es preciso recordar otros aspectos de esta política dirigidos a disminuir el drenaje de divisas para favorecer el crecimiento de las fuerzas productivas. Asimismo, varias empresas de servicios públicos son recuperadas, pasando de manos de capital extranjero a poder del Estado.

Al producirse el derrocamiento del gobierno peronista, la deuda argentina alcanzaba los u$s 757 millones derivada de Uso de Convenios Bilaterales, importaciones de pago diferido y deuda pendiente con bancos de exportación e importación internacionales.

Durante el gobierno de facto, Aramburu acepta la incorporación de Argentina al FMI y Banco Mundial. El gobierno de la Revolución Libertadora aplica un modelo económico de corte liberal: en el momento en que asume la presidencia Frondizi, la deuda había escalado a u$s 1.051 millones.

Este gobierno resultaría continuador del peronismo en el sentido de que apoyaba la integración de empresarios y trabajadores para el impulso de una Argentina Moderna, sostenida con un gran frente nacional, pero se encuentra con el rostro real del Imperialismo.

Frondizi se ve obligado y sitiado por varios sectores económicos asociados con la oligarquía y sectores militares. Finalmente, termina aceptando un acuerdo con el FMI que lo obligaba, a reducir el 15% de los empleados estatales, paralizar obras públicas, libertad de precios, aumento de tarifas de servicios, etc. El fin de su mandato deja una deuda de U$S 1.9K millones.

El breve interregno de José María Guido es contundente: una mega-devaluación (el dólar pasa de $82 a $120) y una reducción de la participación de los trabajadores en el ingreso nacional que va del 50% al 35% en cuestión de meses. Guido paso un par de meses por la Rosada pero dejó una deuda de U$S 2.1K millones.

En el '63, asume Illia. Sus años de gestión se caracterizan por centrar la solución de los problemas económicos en el crecimiento de las exportaciones agropecuarias. Durante su mandato mejoraron los términos de intercambio para la Argentina y las condiciones climáticas fueron muy favorables.
En esta época, no se contraen nuevos préstamos ni se aceptan imposiciones del FMI. La deuda cae a U$S 1.7K millones.

El régimen democrático se ve nuevamente interrumpido, esta vez de la mano del General Juan Carlos Ongania. El nuevo gobierno, instala en el Palacio de Hacienda a un hombre de los sectores más liberales y conservadores: Adalbert Krieger Vasena. Se aplicaron fuertes medidas de corte ortodoxo: una fuerte devaluación, suspensión de los convenios colectivos de trabajo, la sanción de una ley de hidrocarburos que permitía la participación de las empresas privadas en el negocio del petróleo y la sanción de la ley de alquileres que facilitaba los desalojos. Se suspendieron los aumentos de salarios por 2 años, se congelaron las tarifas públicas y de combustibles y se estableció un acuerdo de precios con empresas líderes.

Durante ese proceso militar de Onganía, se produce el negociado de Aluar, mediante el cual se entrega la producción del aluminio a un conjunto de aventureros que hicieron un gran negocio a expensas de los recursos del Estado. En Aluar se produce uno de los primeros casos de cuantioso endeudamiento privado que será asumido por el estado.

En el ocaso de este gobierno, crecimiento de la deuda externa había sido del 21,1% llegando a un total de U$S 3.9K millones.

En materia económica, durante el gobierno del General Lanusse, se continuó con la política de endeudamiento.



Perón nombra ministro de Economía en el 73, a José Ber Gelbard. El nuevo ministro proponía una activa participación del Estado en la actividad económica, mediante la nacionalización de los depósitos bancarios, el control de las exportaciones a través de la junta de carnes y cereales, el control del estado en sectores claves como el transporte, la energía y la promoción de actividades industriales con autonomía del capital norteamericano.

Durante toda su gestión no hubo endeudamiento externo, y no solo eso, sino que Argentina otorgó préstamos a otros países de Latinoamérica.

A partir del '73 se da en el mundo la primera crisis del petróleo. Argentina no escapó a la inundación de los "petrodólares". Ésto generó un gran cambio en el destino de la inversión, pasando de una productiva a una basada en la especulación.

Tras la muerte de Perón, con el nuevo gobierno de signo derechista, la economía argentina sufre graves daños con una inflación galopante, la paralización de las inversiones de capital, la suspensión de las exportaciones de la carne a Europa y el inicio incontrolable de la deuda externa. La deuda externa ya no tiene control. Al inicio del Proceso de Reorganización Nacional ascendía a U$S 9.1K millones.

La Primera Junta militar que encabezó el golpe del '76, designa como ministro de economía a José Alfredo Martínez de Hoz. Durante el gobierno de facto se pusieron en practica una serie de reformas económicas, destinadas a desmontar el Estado de Bienestar, des-industrializar, concentrar la economía argentina y a fomentar el sector financiero y la concentración de tierras en manos de los grandes estancieros.

Experimentan una radical liberalización financiera. La famosa 'bicicleta financiera' sirvió para enriquecer a unos pocos a costa del resto de la sociedad.

En este momento histórico fue que el Estado Nacional comenzó a utilizar como herramienta de endeudamiento a las empresas nacionales. Dichas empresas pedían prestamos a organismos internacionales de crédito por orden del BCRA; estos dólares ingresados al país quedaban en manos del Banco Central y la empresa que había solicitado el préstamo recibía el equivalente en pesos. Es decir que las empresas eran utilizadas como prestatarias del crédito externo.

La deuda pasó de U$S 9.7K millones a U$S 27.1K millones en 1980. Todo un síntoma del desastre de dicho gobierno.

En la web de Gustavo Sylvestre

Link a la página de Gustavo Sylvestre donde hablo sobre las verdades y mentiras de la situación económica en el país.

http://www.gustavosylvestre.com/noticias/verdades-y-mentiras-de-la-realidad-economica-analizadas-por-un-joven-economista/

En Telefé Noticias - Los Chicos y el Dinero

Link al video que hicimos para Telefé Noticias junto a Sofi y Cami. Analizamos la relación de los niños y el dinero a través del proyecto de cocinar milanesas con papas fritas.

http://telefenoticias.com.ar/es/news//20120723/los-chicos-dinero/10052.shtml

En Canal 26, Diario del Domingo junto a Luis Bremer - El Dinero y la Crisis


Banda 3.0 - Historia de la Deuda Externa/Eterna en Argentina


Portfolio Personal - La Relevancia del Sector Tecnológico en la Economía Argentina

El mercado de Tecnologías de la Información y Comunicación tiene como principales actores a nivel global, a Europa y EE.UU., cuya participación representa el 61% del total. América Latina por su parte, a pesar del fuerte crecimiento que ha experimentado en los últimos años, constituye solamente el 7% de lo producido en el mundo. De todas maneras, el sector de Software y Servicios Informáticos es uno de los más dinámicos en el país. Por @matiastombolini.


A lo largo de los últimos 10 años hemos visto como surgieron, crecieron y se desarrollaron nuevas actividades; que no han sido tradicionales en la matriz económica de nuestro país.
En la columna anterior, nos ocupamos de un sector que es una de las vedettes, es decir el turismo. Sector que provee numeros y nuevos récords año tras año.
Hoy analizamos otro sector que se transforma poco a poco en protagonista de un nuevo perfil productivo dentro de la economía nacional. Hablamos del sector Tecnológico.

El mercado de las TIC's (Tecnologías de la Información y Comunicación), tiene como principales actores a nivel global, a Europa y Estados Unidos, cuya participación representa el 61% del total.

América Latina por su parte, a pesar del fuerte crecimiento que ha experimentado en los últimos años, constituye solamente el 7% de lo producido en el mundo.
Dentro del ranking regional de producción de Software y Tecnología de la Información, Argentina ocupa el tercer puesto después de Brasil y México.

De todas maneras, el sector de Software y Servicios Informáticos es uno de los más dinámicos en el país: según los datos de la Cámara de Empresas de Software y Servicios Informáticos (CESSI), la facturación creció entre el año 2003 y el 2011 casi un 300%, alcanzando un valor de $2894 USD a fines del año pasado.

La dinámica experimentada por las exportaciones también da cuenta del importante proceso expansivo del sector, siendo hoy la cuarta parte del total producido en el país. El incremento del último año fue aproximadamente del 13%, cerrando el ejercicio con ventas al exterior por un saldo de 747 millones de dólares.

Entre los años 2003 y 2011, la variación que acumulan las exportaciones, alcanzó el 340%. Éstas se destinan principalmente a los Estados Unidos, con un 58,6%; y un 34,6% al resto de los países de América.

En materia de generación de empleo, las cifras son iguales de satisfactorias. El informe de la CESSI indica que, durante el último año, se crearon aproximadamente 10.000 nuevos puestos de trabajo.

Es de suma importancia remarcar el potencial de este sector: mientras en el año 2003 el número de empleados rondaba los 20.000, al cierre del 2011 eran 70.000 las personas trabajando para la industria de software.

Lo que se ve en el gráfico es una representación de los datos mencionados más arriba. En él, se evidencia claramente la relevancia que ha tomado el sector en la dentro de la economía local.




Uno de los hitos remarcables en la consolidación de esta rama de la economía es, sin dudas, la sanción de la Ley 25.922 de Producción de Software; ya que consolida y promueve un sector que se caracteriza, básicamente por agregar valor.

Con esta ley el Gobierno Nacional busca aumentar la competitividad y expansión del sector. A través de ella se otorgan una serie de beneficios fiscales a las firmas exportadoras y se busca también fomentar el ingreso de PYMES a dicho mercado.
Permite la desgravación impositiva sobre el 70% de las contribuciones patronales y sobre el 60% del Impuesto a las Ganancias.

La Ley comenzó a regir a partir del año 2004, y cuya vigencia estaba prevista, en un principio, hasta el año 2014. El año pasado el Congreso extendió el plazo de estos beneficios hasta el año 2019.

Composición del Sector

En la actualidad se compone de un total de 1600 firmas (incluídas desde las multinacionales hasta las PYMES argentinas).

Los principales actores son IBM, NEC, Microsoft, Accenture, Google, entre otras grandes firmas multinacionales que lideran esta actividad.

Cabe destacar de todas maneras, el considerable aporte de las PYMES nacionales, cuya actividad continua con su proceso expansivo: aproximadamente el 65% de ellas exporta a destinos como Brasil, Chile, USA, España, entre otros, como también poseen oficinas en el exterior.

En 360 tv - Turismo


En Banda 3.0 - Ajustes en Provincia y Nuevos Préstamos

El 5 de Julio en mi columna semanal por Canal Metro.


Portfolio Personal - El Turismo en Argentina

Se acercan las vacaciones de invierno y algunos afortunados y afortunadas comienzan a hacer planes para sus viajes invernales. Y si bien esta columna no está pensada para dar consejos sobre como aprovechar mejor las ofertas turísticas, sí podemos tratar de repasar un poco la relevancia y los números de un sector que muestra un dinamismo y crecimiento realmente sorprendentes. Por @matiastombolini


El turismo es uno de los sectores que experimentó un exponencial crecimiento durante los últimos años y es una de las principales actividades generadoras de ingresos y de puestos de trabajo en la Argentina.
En la actualidad, el sector turismo genera más de 1.2 millones de puestos de trabajo en forma directa y representa aproximadamente un 7% del PBI del país.
Según datos extraídos de la Cámara Argentina de Turismo, este crecimiento que comenzó en el año 2003, continúa su tendencia alcista en la actualidad.

En su último informe, revela que el turismo en nuestro país, teniendo en cuenta la actividad realizada por residentes y por no residentes, se expandió un 3,8% durante el año 2011, cerrando el período con un total de 20 millones de turistas, entre los que hicieron turismo dentro del pais, los que viajaron fuera de la Argentina y los que llegaron a nuestro pais, procedentes de otros paises.

Este crecimiento fue sostenido fundamentalmente por los turistas residentes. Podemos verlo en el siguiente gráfico: mientras el número de turistas no residentes se mantuvo más o menos estable, el turismo realizado por residentes aumentó en un 5% aproximadamente.





Desde hace ya dos años, la Argentina se mantiene como el principal destino de Sudamérica en la llegada de turistas, puesto que es seguido por Brasil - ¡Sí, leíste bien!- . Según las estadísticas publicadas por la Organización Mundial del Turismo (OMT), nuestro país se encuentra en el puesto 43º dentro del ranking mundial.




A pesar de la crisis económica que están atravesando los países desarrollados, el turismo aumentó durante el año 2011 un 4,4%, y las perspectivas para el presente indican que el número de turistas se seguirá incrementando a una tasa que rondaría el 3% o 4%.

Pero, a pesar de la gran recepción de turistas por parte de nuestro país, el saldo de la balanza es negativo. Es decir, la cantidad de argentinos que viajaron al exterior y el gasto que ellos realizaron, superan a la cantidad de turistas que arribaron a nuestro país y el monto que los mismos consumieron.

De lo siguiente, podemos destacar que si bien el turismo emisivo y el receptivo experimentaron cierto crecimiento; el primero varió en un 26%, mientras que el segundo lo hizo en un 6%. Como consecuencia de esta tendencia, el balance pasó de ser positivo a ser negativo.

Una de las principales casusas de la desaceleración del crecimiento del turismo, es el freno de la economía brasileña, que mientras en el año 2010 creció al 7,5%, durante el año 2011 lo hizo a una tasa que rondó los 2,7%. Y como es de esperar, otro punto a tener en cuenta, es el enfriamiento de la economía a nivel global.
Composición de los turistas

A lo largo del año 2011 llegaron al país unos 5.7 millones de turistas, cuyo lugar de origen fue muy diverso y en donde predominaron los turistas de los países vecinos (68%). Entre ellos, cabe destacar la incidencia de los viajeros provenientes de Brasil (23%).

A partir del año 2010 se destaca el arribo de los brasileños a la Argentina, debido al fortalecimiento que experimentó su moneda en este período. El consecuente aumento de su poder de compra los invita a hacer shopping en la Ciudad de Buenos Aires.

Si consideramos los turistas procedentes del resto del mundo (32%), son los europeos los que más visitan el país (13%).



El portal Tripadvisor en su ranking Traveller's Choice, ubica a la Ciudad de Buenos Aires como principal destino turístico del país. Es también la más visitada en todo Sudamérica, más aun que Rio de Janeiro y Machu Pichu.
En el ranking se destaca también la importancia de las ciudades de San Carlos de Bariloche, Puerto Iguazú, Mendoza, Salta, El Calafate, Villa La Angostura, como principales receptoras de turistas. ¿Cuáles son las ciudades más elegidas por los argentinos?

De los argentinos que viajaron al exterior, casi el 80% eligió como destino a países limítrofes. Dentro de este grupo, el país más visitado fue Uruguay, que recibió al 22% de los viajeros argentinos.

De los millones de turistas restantes, el 9% optó por países del resto de América, un 7% pasó por USA y Canadá, y solo el 4% recorrió el continente europeo.
El ranking Traveller's Choice, la aparición del continente Sudamericano aparece recién en el puesto número 13 de la mano de la ya mencionada Ciudad de Buenos Aires.

Fuentes:
. Organización Mundial del Turismo
. Ministerio de Turismo
. Tripadvice

En Canal 26 junto a Luis Bremer

Video del 4 de Julio en Canal 26 junto a Luis Bremer


En 360 TV economía - El Precio de las Propiedades en la Ciudad

Les dejo el video de mi columna del 3 de julio en 360 TV.