martes, 18 de octubre de 2011

The Beatles - Can´t Buy Me Love

Para cortar con tanto análisis económico, una joyita que habla justamente de uno de los sentimientos más lindos y que no tiene precio ni mucha explicación. Que lo disfruten!

Columna para Diario Perfil 15/10/11


Cómo comprar e invertir con inflación

Argentina es uno de los países con mayor inflación del mundo. También uno de los países con mayor crecimiento.

Mientras la tasa de inflación esperada para este año ronda los 26 puntos, el crecimiento sería del 8% como mínimo.
Esta situación presenta un panorama donde la demanda y los precios crecen, al tiempo que la oferta de bienes y servicios también lo hace, aunque un poco mas lentamente.
Los consumidores somos objeto de estrategias para captar nuestra atención que prometen precios inmejorables. La información que contienen los precios resulta parcialmente incompleta y dados los permanentes movimientos de precios, comparar se vuelve una tarea realmente difícil.
¿Cuánto vale una remera de algodón? ¿Y una notebook estándar? ¿Cuánto sale un kilo de tomate? ¿Cuál es el precio de la nafta súper?
El lector podría responder algunas de estas preguntas, pero difícilmente pueda contestar todas; peor aún, si camina, verá que el mismo producto tiene importantes variaciones de precio según la zona en que está exhibido.
Cuando el contexto es  inflacionario, caminar es una conducta recomendable. Definir pautas de consumo inteligente es beneficioso para hacer rendir más nuestro dinero. El ejercicio de comparar también se puede hacer utilizando la web como fuente alternativa de información.
Otro aspecto a tener en cuenta es el orden y la planificación. Utilizar las promociones y descuentos que ofrecen los grandes actores del mercado nos permite obtener importantes ahorros si estamos alerta a estas ofertas.
Siempre es bueno aprovechar tantas cuotas sin interés como nos ofrezcan para adquirir los productos, no hay que tenerles miedo a las cuotas sino a la falta de planificación. Pensemos que si compramos  y consumimos algo hoy y lo pagamos en varias cuotas, al momento de terminar de pagarlo es muy probable que ese producto haya subido de precio.
Hace poco tiempo a las tradicionales tarjetas de fidelización se sumaron empresas que ofrecen descuentos y ofertas realmente muy importantes. En general, los descuentos más grandes se dan en el sector servicios, pero lo cierto es que si nos suscribimos, lo cual no tiene costo, podemos obtener ahorros de hasta el 70% en ciertos rubros.
El otro dilema en tiempos de inflación es cómo hacer para preservar el valor de nuestros ahorros. Esta tarea es igualmente difícil que la anterior.
Muchos consumidores están volcándose al consumo de bienes durables como una forma de establecer un equilibrio entre disfrute y preservación de nuestros ahorros. La compra de autos cero kilómetro es una de esas formas, ya que si adquirimos un vehículo hoy, es muy probable que el año que viene su precio sea el mismo que abonamos en su momento por la unidad nueva.
La alternativa de los inmuebles también es válida; si bien en el último año, han subido menos que la inflación.
El mercado financiero ofrece alternativas como bonos, acciones, fondos de inversión, plazos fijos y otros instrumentos más sofisticados. Sin dudas, son herramientas para considerar, porque con inflación guardar el dinero en un cajón es lo mismo que perder algo así como un 20% al año.
La alternativa de la compra de dólares para preservar los ahorros está instalada en el subconsciente de los argentinos; sin embargo, aquellos que compraron dólares en la última década han sufrido grandes pérdidas. Consideremos que aquel que pagó 4 pesos por dólar en 2002, hoy apenas recuperó su dinero en términos nominales; lo cual supone además la desvalorización por la inflación.
Esto se suma al hecho de que en la Argentina y en la región, sólo en 2010 hemos tenido inflación en dólares en el orden del 19% para nuestro país y del 15% para Brasil.
Consumir, ahorrar e invertir de forma inteligente no suelen ser tarea sencilla y en tiempos de inflación, mucho menos. Sin dudas, caminar, estar atentos, planificar y ser ordenados son los secretos de aquellos que mejor lo hacen.


Link: http://www.perfil.com/ediciones/2011/10/edicion_617/contenidos/noticia_0033.html

Entrevista realizada para Revista Ñ

 ¿Cómo se "baja" la abstracción de la economía a la vida cotidiana?
 La economía debe ser entendida como la forma de razonar de manera coherente, como se reparten bienes y servicios que son esencialmente escasos. 
En este sentido, no debe ser observada como una disciplina compleja ni centralmente abstracta. Si bien es cierto que se vale de “modelos” que son simplificaciones de la vida real y que estos modelos contienen elementos matemáticos que son la garantía de  la lógica interna de los mismos.
Se suele cometer el error de suponer que por desconocer la terminología académica  no se “sabe” (si es que alguien puede definir el significado de la palabra “saber”) de economía.
Practicamos economía cuando decidimos que priorizar en nuestras compras mensuales, o cuando definimos un objetivo, trazamos un plan y finalmente lo ejecutamos en base a recursos escasos con un resultado concreto. ¿complicado? Pues no, eso es lo que hacemos cuando preparamos una rica torta.

¿Quiénes (y por qué) son los beneficiados de hacer comprensible la economía?

Los principales beneficiarios de hacer  comprensible la economía somos aquellos que estamos convencidos que cuando la economía resulta muy complicada de entender, es porque al lector lo están macaneando.  Ya que otra aspecto central que hace a la economía es comprender los intereses que representa quien esta hablando o escribiendo. Por eso decimos que si se torna demasiado compleja y elitista solo se busca maquillar lo mas relevante de esta ciencia que es lo relativo al análisis de quién se queda con  qué cosas.
Resulta llamativo como en determinadas ocasiones el debate económico se da sin que queden de manifiesto claramente y de antemano la posición de aquel que fundamenta, sino de forma indirecta. Es decir, a veces la economía también puede ser un instrumento de marketing y posicionamiento estratégico.
Entender esto nos permite quitarle dramatismo a esta actividad y dotarla del nivel de complejidad que en verdad reviste. Esto es, ni mas ni menos que el de preparar un deliciosa torta.

Comentario sobre el "Efecto Google" para Revista Susana


  El efecto google se puede aprecia claramente en las nuevas generaciones. Mis estudiantes utilizan el buscador mas allá de lo que nosotros nos podemos imaginar. Ellos y ellas crecieron con google y por ello utilizan este recurso realmente como una “memoria externa” que se complementa con la suya propia.Hay ciertos datos que han dejado de retener ya que están seguros que eso lo encontrarán el Internet. De hecho se percibe un cambio en el sentido del desarrollo de la habilidad para encontrar la información en lugar de retenerla. 
   Independientemente de la valoración que podamos hacer al respecto, la relación de los chicos con la red es un dato de la realidad y debemos aprender a integrar esto en nuestras vidas. 
 Hoy resulta realmente muy importante comprender que el desempeño profesional  de las nuevas generaciones estará ligado, entre otras cosas, a su capacidad de seleccionar la información útil de la que no lo es. En un mundo saturado de datos y referencias, nada nos garantiza la veracidad de las mismas. Por eso es extremadamente importante que los estudiantes comiencen pro no creer todo lo que esta en Internet, sino que deben tomar esa información como un insumo que luego habrá que procesar bajo el tamiz del criterio intelectual y profesional.

Entrevista realizada para Revista Maru

¿Cuáles son las diferentes maneras  más efectivas de ahorrar?
Argentina es un país que crece. De eso no hay dudas. También es un país que tiene una inflación que supera holgadamente el 20% anual. De eso tampoco hay dudas.
Cuando pensamos en “ahorrar” siempre es bueno que recordemos qué es exactamente el ahorro, es decir postergar el consumo presente, de hoy, en función del futuro, digamos dentro de seis meses.
De modo que al momento de ahorrar es fundamental hacerlo con un sentido práctico y un objetivo concreto. El primer paso, como en otros órdenes de la vida, es tener claro para qué estamos ahorrando. Determinar un objetivo concreto permite elegir la mejor estrategia.
Recordemos que en nuestro país a medida que pasa el tiempo los precios, en promedio, aumentan.   Es por esto que cuando dejamos de consumir o guardamos el dinero que nos “sobró” del  mes,  para una cuestión concreta debemos hacerlo de la forma más eficiente en cada caso.
Supongamos que queremos ahorrar para irnos de vacaciones.  Aquí  lo que resulta definitorio al momento de  seleccionar como vamos a ahorrar, es tener claro de antemano el destino al que queremos ir.  Una vez elegido el destino y como sabemos que si quisiéramos ir guardando el dinero en un chanchito, solo estaríamos perdiendo algo así como el 20% al año.  Lo mejor que se debe hacer es tratar de ir pagando el viaje en cuotas ya que si anticipamos nuestra compra fijamos el precio y si lo pagamos en cuotas, además usamos la financiación que nos propongan, que en general implica tasas interés moderadas,  y  además nos obliga a mantener una conducta, lo cual le da un orden y evita que utilicemos el dinero para otra cosa, que siempre es importante para que el ahorro sea de utilidad.
Claro que no es lo mismo comprar un paquete turístico que ir a la costa y alquilar una propiedad, pero aquí también  resulta sumamente útil alquilar lo antes posible o al menos tratar de reservar, tanto el departamento como la carpa. Cierto es que no se puede pagar el departamento con la tarjeta de crédito en cuotas, pero sí podemos darle cheques al propietario para que los vaya depositando mensualmente antes que llegue la fecha en que debemos ocupar la unidad.
Si lo que queremos es ahorrar para comprar un auto, en este caso, los planes de ahorro son la mejor alternativa hoy en día, por muchas razones pero fundamentalmente porque preservan bastante bien el valor de la moneda con sus cuotas fijas, porque nos permiten asumir un compromiso estable en el tiempo que evita distraer recursos en otras cosas que no  sean el objetivo principal y porque adquirir unidades cero kilometro es en si mismo un mecanismo útil para preservar de algún modo nuestros recursos, ya que si bien el auto pierde valor año tras año por un lado, por el otro aumenta por la inflación de modo que es probable que veamos que nuestro vehículo tiene el mismo precio un año después que lo hayamos comprado. (claro que en este caso el 0KM será bastante más caro)
Si simplemente tenemos unos pesos y queremos evitar que pierdan valor, es importante que tomemos conciencia que la vieja práctica de comprar dólares no siempre es la mejor alternativa. De hecho aquel que compro dólares hace casi 10 años, en 2002 y pago por ello 4 pesos, hoy ha perdido mucho dinero.
Lo cierto es que hay muchos productos financieros que funcionan bastante bien, plazos fijos, fondos de inversión, o simplemente comprar acciones o bonos, si bien en el pasado este tipo de herramientas eran solo para unos pocos, hoy cualquier banco las tiene disponibles para el público en general y para montos desde mil pesos en adelante, según sea el producto que se elija.

¿Qué medidas de ahorro pueden  tomar los chicos?          
Al momento de pensar en el ahorro para los chicos lo mejor es utilizar estrategias que los hagan participes directos de los beneficios de ahorrar.
Las alternativas varían según el rango etario en que se encuentren , pero si pensamos en adolescentes de   entre 11 y 15 años aquí van algunos tips:
Darles un monto de dinero fijo durante por períodos de tiempo cortos, por ejemplo una mesada semanal. Dicho monto debe ser estable a lo largo de las diferentes semanas y tiene que ser suficiente para cubrir los gastos que se deseen. Dichos gastos deben quedar claros entre los chicos y sus padres, y si el chico/a se gasta el dinero antes de cubrir sus gastos NO hay que darle nuevamente, de modo que se comprenda que el dinero es un bien escaso.
Hacer que los chicos se paguen (de su mesada) gastos cada vez mas relevantes para ellos, por ejemplo se   comenzar con el kiosco del colegio y avanzar a temas mas complejos como el gasto de su propio celular, si no le alcanza y se se queda sin crédito, NO hay que recargarle el teléfono, nuevamente , la idea es que se hagan cargo de las consecuencias de sus actos.
Establecer un “presupuesto” de gastos  para el retorno a clases es otro camino interesante.  Cada año escolar que comienza los padres solemos enfrentar una interminable lista de útiles escolares que debemos comprar para encarar el nuevo ciclo lectivo. En este caso resulta muy practico ponerse de acuerdo con los chicos/as para establecer cual es el presupuesto que vamos a designar para comprar los elementos de dicha lista. Una vez establecido esto, invitamos a los chicos/as a que sean ellos los que (acompañados por un adulto) realicen las compras, y si les sobra dinero se lo pueden quedar. Allí veremos como comienzan a reciclar útiles del año anterior como mochilas, carpetas  y cartucheras, lo cual esta muy bien, ya que podrán ahorrar, como producto de sacrificar algo concreto. En este caso sería tener todos los útiles nuevos.
Lo ejemplos son muchos pero lo importante es comprender que el valor de cualquier acción que tomemos tendiente a darle sentido al hecho de ahorrar, debe estar íntimamente ligada a la concepción del hacerse cargo de las cosas propias, lo cual es la condición necesaria para que el ahorro tenga resultados útiles.

¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de ahorrar para no caer en la tentación de usar el ahorro antes de tiempo o quedarse a mitad de camino y desmotivarse?
A la hora de ahorrar lo mas importante es saber para qué lo estamos haciendo. Definir una objetivo concreto ya sea, viajar, comprar un auto, o una computadora, es el primer paso para que el plan de ahorrar sea exitoso.
Si bien pensar en establecer un plan parece algo sofisticado y de difícil cumplimiento, normalmente comprar en cuotas en épocas de inflación, es de algún modo, una forma de ahorro ya que las cuotas no varían, y el precio de lo que compramos si. Por lo tanto sirve.
Cuando lo que queremos en algo de un valor mas elevado como puede ser un vehículo, los famosos planes de ahorro suelen ser una muy buena alternativa, ya que evitan que distraigamos el dinero en otras cosas, y nos permiten mantener el orden en función de un bien determinado, sabiendo que igualmente al momento que nos den el auto, tendremos  la posibilidad de pagar la diferencia y pedir uno de mayor valor.
En suma, si bien ahorrar en tiempos de inflación no es tarea sencilla, saber lo que se quiere y ser ordenado/a suele ser el secreto de los que logran hacerlo de forma mas eficiente.

¿Cuáles son las peores maneras de ahorrar?
Sin dudas la peor forma de ahorrar en poniendo el dinero en el chanchito. Con una tasa de inflación de mas del 20% anual, eso es lo que se pierde por colocar pesos en un recipiente cuyo único servicio es evitar que agarremos el dinero cuando nos vemos tentados a tomarlo.
Si bien comprar dólares es un mecanismo arraigado en el inconsciente de los argentinos, lo cierto es que tampoco ha resultado una buena herramienta de ahorro ya que quién compró dólares hace casi una década hoy sólo ve que ha tenido una leve variación en términos nominales, mientras que en términos reales (es decir el poder de compra de la moneda) ha perdido bastante valor.


Periodista: Verónica Salatino